Fue esa admiración la que los llevó a vestir a Independiente con sus mismos colores. 2010, en la que Ronaldo no superaba esa ronda de la competición. El 1 de noviembre, después de que Ronaldo tardó casi tres semanas en recuperarse del COVID-19, regresó a la acción contra Spezia, donde salió del banco en la segunda mitad y anotó en los primeros tres minutos.